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Alfonso Rueda y Alfonso Sánchez Izquierdo en una imagen institucional del Gobierno gallego / Xunta de Galicia |
7.12.2023
La representación del personal de los medios públicos exige el cese inmediato de Alfonso Sánchez Izquierdo como director general de la corporación y de María Concepción Pombo Romero y Alejandro López Carballeira -respectivamente directora y subdirector del Área de Informativos- y que se se ponga fin a las presiones que las y los profesionales tienen que soportar por parte de quienes no aceptan las presiones y se niegan a escribir noticias al dictado de los intereses del Partido Popular.
Por este motivo, el Comité Intercentros ha anunciado que pedirá la intervención urgente de la Xunta de Galicia y el Parlamento autonómico para que actúen de inmediato para poner fin "a unas prácticas incompatibles con la prestación de servicio público que el ente tiene dictado por Ley" y a una manipulación informativa que consideran como "un gravísimo delirio partidista".
En este sentido, el grupo ha solicitado reuniones con el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda y los líderes de la oposición Ana Pontón (BNG) y Xosé Ramón Gómez Besteiro (PSdeG), a quien transmitirán la gravedad de la situación que atraviesan la radio y televisión públicas, instando a una renovación inmediata de la cúpula de la corporación que consideran "ha perdido el norte".
Según el comité de empresa tanto la Televisión de Galicia (TVG) como la Radio Galega (RG) "han abandonado todo respecto por unas mínimas normas deontológicas del periodismo y reproducen sin pudor en cada informativo un ideario calcado de arriba abajo, sin fisuras y con una tendencia partidista evidente", de modo que traicionando su función de servicio público "funciona solo como el más eficaz órgano de propaganda del partido que gobierna".
Así, el Comité Intercentros denuncia que tanto la línea editorial de Crónica das Dúas -coordinada por Xosé Manuel Valiñas o de la Crónica del fin de semana de la Radio Galega -en manos de Luís Ojea-, se asemejan más a una emisora de ultraderecha que a los criterios de imparcialidad, veracidad y pluralidad que se le suponen por Lei a los medios públicos, que cuentan con la consideración de servicio esencial.
La manipulación -denuncia el comité-, se ha agravado especialmente en la Radio Galega donde ya iniciada la temporada de otoño se han producido "sorpresivos cambios organizativos y de contenidos que la empresa no ha querido justificar" en espacios donde cuesta distinguir la información de la opinión a favor de los intereses del PP.
La plantilla de profesionales de la CRTVG manifiesta ser consciente de la responsabilidad que ejerce cada día en un medio que es de servicio público y "quiere sentirse útil y parte activa para conseguir una sociedad más justa, democrática y plural", razón por la que denuncian el acoso que las y los periodistas están sufriendo si no se pliegan a escribir noticias al dictado del Partido Popular, lo que les está provocando "graves daños psicosociales" y una reacción periodística sin precedentes a través del movimiento "Defende a Galega", que ya alcanza las 288 semanas en lucha contra la injusticia y la manipulación informativa.