La Denominación de Origen del aceite de oliva Campo de Montiel se opone a la minería de tierras raras y pide el rechazo de la Junta al proyecto de Quantum en Ciudad Real ante el riesgo que supone para el pujante sector agroalimentario de la provincia

La provincia de Ciudad Real tiene una de las principales producciones olivareras de la península ibérica, reconocida por su gran calidad / Creative Commons

24.6.2024

La entidad olivarera expresa en un comunicado su firme rechazo a la propuesta de la mercantil para llevar a cabo tareas de exploración y explotación de tierras raras entre los municipios de Santa Cruz de Mudela, Torrenueva y Valdepeñas al considerar que el plan de la extractiva "representa una seria amenaza para la industrial del aceite de oliva y el prestigio de su sello de calidad".

Por este motivo ha instado a la Consejería de Desarrollo Sostenible y al propio Gobierno regional a desestimar el proyecto de investigación "Neodimio" y "cualquier otro plan futuro" al considerar que la apertura de una explotación de estas características podría afectar "sin remedio" a la imagen pública del producto, generando desconfianza en los consumidores y perjudicando sus ventas

"La industria del aceite de oliva en nuestra provincia es un pilar fundamental de su economía del que dependen miles de puestos de trabajo directos e indirectos, los mismos que pondría en riesgo la apertura de proyectos de tierras raras, afectando negativamente al empleo y bienestar de muchas familias", ha explicado la Denominación de Origen Protegida (DOP) explicando que en la provincia de Ciudad Real, con una producción de alta calidad estimada en 43.000 toneladas de aceite de oliva, representa el 50% del volumen a nivel regional de Castilla-La Mancha (46.000), dato que a juicio de la entidad "ya es de por sí lo suficientemente representativo para que las autoridades puedan valorar qué es lo que está en juego".

"Por otra parte, esta actividad minera, que implica remoción y procesado de un mineral de tierras raras con elementos radioactivos como el torio y el uranio durante su fase de explotación, es sabido que conlleva riesgos significativos para la salud humana y el entorno natural como así demuestran múltiples estudios científicos internacionales, poniendo asimismo en peligro la biodiversidad de la región", ha detallado.

"Queremos un futuro para Ciudad Real y sus habitantes, pero no este. Por ello instamos a las autoridades competentes a considerar los impactos negativos de la minería de tierras raras y a velar por la preservación de nuestra industria, que es esencial para miles de familias en la provincia", ha afirmado la DOP en su comunicado.

"Es responsabilidad de los Gobiernos proteger a la población y las actividades económicas tradicionales que desde tiempos inmemoriales sustentan a la comunidad. Por eso su prioridad debe ser preservar nuestro entorno, nuestra salud y nuestro futuro razón por la que exigimos que se priorice el interés general frente a actividades que ponen en riesgo nuestro patrimonio más querido y en último término, lo que en definitiva somos", ha concluido la entidad.